Hace tiempo os traje el testimonio de una compañera que tuvo a su hija por maternidad subrogada. Desde entonces varias personas que conozco tanto off line como on line han decidido iniciar ese camino que a algunos como Lauren, este feliz papá soltero por elección le llevado hasta sus mellizos. Pero hay otras personas que continúan en este duro y carísimo proceso: Una de ellas es Ana M. B. del P.
Tras mucho pensarlo y pedir un crédito bancario decidió que la subrogación era su opción y se decidió por una clínica de Estados Unidos.
No voy a relataros el enorme esfuerzo físico,psíquico y por supuesto económico que ello supone,máxime para una persona como Ana que no habla ni palabra de inglés,el lanzarse a esta aventura.
Hace más de un año viajó a Chicago,que es donde está la agencia y conoció a la que ella había seleccionado como subrogada,Holly. Ana nos contó que desde el primer momento que conoció a Holly supo que era la candidata ideal y la mejor persona para poder ayudarla en su sueño. Eligió a un donante de semen y a una donante de óvulos que dieron el excelente resultado de 10 embriones de muy buena calidad.
En abril a Holly se le realizó una transferencia de dos embriones de calidad A dando por resultado a los diez días una beta positiva. La alegría fue máxima hasta que desgraciadamente Holly tuvo un sangrado gracias al cual se descubrió que en realidad estaba embarazada de mellizos y había perdido a uno de ellos.
Al no saber la existencia de este segundo feto el golpe fue duro pero como el otro seguía latiendo todo seguía su curso. Pero el gran mazazo vino a los pocos días cuando Holly perdió a este y hubo que practicarle un legrado.
Muchas de vosotras habéis pasado por un aborto,así que no hace falta que os contemos cómo se sintió Ana, encima estando a 10.000 kms de distancia.
Tras este doble aborto es cuando el sueño de Ana se empieza a tambalear, ya que aunque le quedan embriones para transferir, una transferencia cuesta alrededor de 8000 dólares (unos 6000 €).
Decidió entonces pedir otro préstamo,esta vez familiar y afrontar una última transferencia,ya que económicamente no podía permitirse más.
No es necesario contar en que estado anímico se encuentra Ana porque os lo podéis imaginar, aquellas de vosotras para las cuales el camino a la maternidad ha sido largo y/o lleno de baches lo sabéis perfectamente.
En estos momentos hay seis preciosos embriones vitrificados, pero no hay dinero para otra transferencia. Conocemos a Ana, la queremos, la habéis visto jugar con vuestros hijos, nos ha apoyado siempre en todo. A nosotras se nos parte el corazón de pensar que esto termina aquí No podemos aceptarlo, no queremos, queremos luchar e intentarlo una vez mas, solo una. Con la esperanza de que en otras ocasiones nos hemos quedado embarazadas en nuestra ultima oportunidad.
Sabemos perfectamente que no es buen momento, que estamos criando hijos, o a punto de hacerlo, o buscando el segundo, en paro, en riesgo de despido o con contratos cortos... que cada una aporte lo que pueda, juntas somos muy fuertes y creemos que se puede conseguir.
Hemos calculado que son necesarios 20000 € para poder pagar la transfer, el seguimiento del embarazo y el parto (incluyendo una contingencia de 5000€ por si fuera necesaria incubadora, ya que en USA la sanidad va por seguro privado).
Sabemos que es una cantidad muy alta, la meta es ambiciosa, pero los embriones están ahí, si es necesario esperaremos meses hasta poder conseguir el dinero, Ana sigue ahorrando cada céntimo que puede, soñamos con que nos toque un pellizquito de lotería que de un empujoncito... en fin... no nos vamos a rendir, aunque tampoco vamos a ser ingenuas, somos muy conscientes de que esto es muy difícil.
Os mantendremos informadas de todo el proceso, siempre mimando y cuidando la intimidad y los sentimientos de Ana. Si en algún momento no conseguimos el dinero suficiente y hay que abandonar la idea de hacer la ultima transfer, se devolverá cada euro a su dueña.
Guardad la dirección para que no se quede en la bandeja de spam o correo no deseado y utilizadla a partir de ahora: operacioncoletas@gmail.com
Como dicen las chicas, es un momento complicado y alguien dirá... ¿joer, porqué no me ayudan a mí?
Sabemos que nosotr@s queremos ayudar a Ana y cada uno sabe si puede o quiere, aún pensando lo bien que le hubiera venido que alguien hiciera esto por él.
Os podéis imaginar cómo debe ser la situación de dura y cómo de grande es ese deseo inquebrantable para exponerse de esta manera al juicio de personas que no la conocen y no saben de su lucha.
Pero los que tenemos este sueño sabemos que nada nos para por tener a nuestro hijo.