Quiero compartir con vosotr@s el relato que generosamente ha escrito una compañera que tuvo a su hija el año pasado en USA gracias a esta forma de llegar a la maternidad/paternidad. De hecho para los hombres es casi el único camino real, pues aunque la adopción esté permitida en España para ellos , la realidad es que los países de origen de los niños ,no los aceptan.
Este camino no es entendido por todo el mundo; ella ha querido compartirlo y ponerse a nuestra disposición para contestar o ayudar si alguien requiere información específica.
Por mi parte, he aprendido que en este
viaje a Australia hay que tener cuidado en donde nos ponemos el límite, pues cuando llegamos a él, el deseo inquebrantable sigue ahí...
Lo digo yo, embarazada de dos tesoros donados por una pareja y que cuando lo intentaba con mis óvulos, decía que nunca llegaría a la ovodonación, pues ya tenía un hijo de mis óvulos y al fin y al cabo ya era madre...
Me cuesta, como a casi todos, entender a estas mujeres que gestan un bebé y al nacer se lo entregan a otra persona ; pero también creo que en el caso de USA ,donde son mujeres con hijos , trabajo y que no necesitan el dinero, es muy especial...no creo que ni nos podamos imaginar esa especie de solidaridad-generosidad que tienen algunas mujeres norteamericanas.
Me preocupaba mucho la vida prenatal, el contacto madre gestante y niño, pensaba que no se conectarían nada con él, para no sufrir...pero, no sé , de repente el otro di entendí que seguramente si que se conectan con él, si que le hablan, si que le hacen sentir querido ,por supuesto desde el sitio en el que alguien le está trayendo a este mundo con mucho amor, pero para otras personas... es díficil...
Os pego también el link del artículo que publicaron esta semana en
EL País semanalAquí va el relato:
MATERNIDAD SUBROGADA, OTRA ALTERNATIVA DE SER MAMA.
Es muy difícil transmitir en tan poco espacio la aventura que yo he vivido para conseguir mi sueño de ser madre, quizá poco convencional pero tan digna y válida como el resto… Me llamo Cristina, soy soltera, tengo 36 años y una niña preciosa de 11 meses en este momento, sin duda lo mejor de mi vida, la adoro y cada vez que la miro me confirma que todos los sacrificios hechos para traerla a este mundo, han merecido muchísimo la pena. Mi aventura comenzó hace mas de tres años, cuando tras unas pruebas detectaron un problema en mi útero que hacía imposible llevar a término un embarazo, en ese momento creí que todas las puertas se cerraban de golpe y que mi sueño de ser madre se había truncado, pero yo nunca quise creer en ello, siempre pensé que tenía que haber una solución, yo siempre supe que tenía que ser madre, que todo no podía acabar ahí. En ese momento puse mis ilusiones en la adopción, pero una vez iniciados los trámites para la idoneidad decidí desistir puesto que los solteros tenemos un trato discriminatorio respecto a los matrimonios, un farragoso proceso de bastantes años y saber que mi expediente siempre iba a estar por debajo de la inmensa mayoría, fueron desgraciadamente, razones más que suficientes para no sentirme con fuerzas de ir por esa vía. Yo sabía que existía la subrogación, pero no tenía ninguna información al respecto, así que decidí comenzar a documentarme sobre este tema a través de internet, tenía que encontrar una salida y así fue. Tras muchos meses de estudiar el tema, de informarme legalmente, de hablar con varias personas en España que ya habían pasado por esto, tras escribir a unas cuantas agencias en los EE.UU para recabar información, etc, por fin, tomé la decisión de lanzarme a la piscina en una agencia del estado de Illinois, con la que ya tenía contrastada información y sabía de su gran profesionalidad. Tras cruzarme varios mails con ellos, y una conversación telefónica, decidí trabajar con ellos en diciembre del 2008 y para febrero del 2009 me presentaron a la que fue mi maravillosa madre subrogada, una joven de 28 años, con dos niñas, que trabaja en un banco y casada con un policía. Cuando ví su foto, supe que sería ella la que me iba a ayudar a traer a mi futuro hijo/a al mundo y no me equivoqué. Mi primer viaje a Chicago fue para Marzo de ese mismo año, donde tuve la oportunidad de conocerla a ella y a su marido personalmente, cenamos juntos, hubo muy buen feeling y allí tuve el privilegio de conocer a una magnífica persona, con una generosidad increíble, porque no os penséis que solamente esto es una cuestión de dinero para ellas, eso nunca es el principal motivo porque no se puede pagar todo lo que ellas hacen por nosotros os lo aseguro, es también su gran humanidad y sus ganas de ayudar a ser padres a quien realmente no pueden serlo ya que todas son madres, sensibilizadas con la maternidad y con la desgracia que supone no poder hacerla realidad. De hecho, no solo fui yo la que la elegí a ella sino que ella también me eligió a mí, ellas quieren estar seguras de a quien van a ayudar, cosa perfectamente entendible porque a lo largo del proceso entran en juego muchas emociones, hay mucha comunicación y es muy importante que haya muy buena relación y además ellas quieren estar seguras que ese bebé tendrá una buena familia. En ese mismo viaje también conocí a las personas de la agencia que me presentaron a mi subrogada y que también actúan de administradoras para ir pagando todos los gastos que se van generando a lo largo de todo el proceso; así como al ginecólogo y abogada que iban a intervenir, puesto que tuve que negociar un extenso y complejo contrato y también tuve que pasar por muchas pruebas ginecológicas y sanitarias, ya que mi hija nació de un óvulo mío y un donante de esperma que yo misma escogí porque en los bancos de esperma de EE.UU te dan la opción de elegirlo a través de unas fichas con las características del donante. En Junio de ese mismo año viajé a Chicago de nuevo para llevar a cabo el tratamiento, punción y posterior transfer a mi subrogada pero en este primer intento no pudo ser. Después del consiguiente disgusto, decidí seguir adelante y volverlo a intentar tres meses mas tarde repitiendo todo el proceso de nuevo con todo el coste económico y psicológico que esto supone, pero volví a viajar a Chicago para Octubre y tras extraerme 9 óvulos, se consiguieron 3 embriones de buena calidad que fueron transferidos a mi subrogada y de la que quedó embarazada de dos, aunque uno de ellos dejó de crecer y se reabsorbió, pero mi niña continuó adelante hasta el 24 de Junio del 2010, día que nació mi hija, sin duda el mejor día de mi vida, nunca olvidaré el momento en que la ví salir de la barriguita con esa luz blanca que la iluminaba….Cuanto pude llorar… Los nueve meses anteriores son realmente intensos, es como una gran montaña rusa donde hay días que estás eufórico, como cuando tu subrogada te envía las ecografías y te confirma que todo va bien y que tu hijo crece bien y sano, como días en los que te mueres de miedo pensando en lo lejos que estás y en la de cosas que pueden ocurrir sin tu poder controlarlas ni hacer nada, pero en mi caso puedo decir que mi subrogada me tenía informada semanalmente de su estado, de todas sus sensaciones, de cómo crecia su barriguita…. Me hizo muy participe de todo, incluso me enviaba videos que su marido grababa en el momento de las ecografías. Yo fui muy afortunada de contar con una mujer tan maravillosa como ella, sé que no en todos los casos es así, pues hay muchas mujeres que prefieren tener el mínimo contacto con los futuros padres para no implicarse mucho emocionalmente, pero el día del nacimiento de mi hija, fue una fiesta en el hospital, sus hijas se pusieron pegatinas que decían “your big sister” “tu hermana mayor” y es que realmente ellas sienten como si fuera así, aún sabiendo que no lo es. Me llenaron la habitación de regalos, globos, tarjetas dedicadas… Inolvidable!!! Todo eran sonrisas, cariño, afecto, emoción, amor y felicidad en aquella habitación, ninguna queja ni ningún mal gesto de dolor…. ¿Alguien puede imaginar semejante acto de generosidad? Ella es así. Hoy esa familia, es mi familia americana, y espero que siempre sea así. Va por ti querida amiga, siempre estarás en mi corazón y en el de mi hija.